Ahora!

...Llegué a la "Meta" de mis posibilidades. Conseguí el quinientos por cien . Ahora me toca descubrirme, creer y ser .(José Manuel M.Garrido *//Richard Stovinky ©**//)
*jmmg// ©

jueves, 14 de junio de 2012

**EL CENTRO DEL MUNDO**

Libro que vamos a ir viendo y desarrollando en proporciones constantes. Prometo no dar Mendrugos de Tiempo, y si queda lugar, editaremos el libro, seguro.
Aún me dice Aurora : " ¿ IMPOSIBLE  aún no la hemos incluido en nuestro diccionario verdad, papi ? ".



Introducción : 

..."No me siento el centro del mundo.
Ni tan siquiera me puedo dejar perder hacia algo que va, más allá del fin primordial de deshacer lo que ha estado vinculado siempre, a mi alrededor. No puedo pensar que todo lo que desearía conveniente realizar, pudiera de una u otra forma fomentar la angustia que día a día he ido digiriendo.
Deseo de una vez para siempre aflojar todo estado de intransigencia y no volver a escuchar esa voz que poco a poco ha ido desvaneciéndose y formando parte de mi pesadilla.
El mundo no ha cambiado . La gente no ha cambiado y es por eso que desde lo más alto de cualquier vértice, con espasmo inquebrantable, hago constar la decisión de que, a pena una voz vale nada. Tan sólo un susurro es, quien me salva ".
-Habana. 09 de Septiembre.2013.

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EL CENTRO DEL MUNDO                    José Manuel M.Garrido(**Richard Stovinky)



CAPÍTULO I
La Habana 14 de Septiembre de 2013.

"Como se suele decir en ocasiones determinadas en las que no existe modo alguno de verificar lo qué realmente nos está pasando, hoy, querida mía, estoy perdido. Me encuent..."
No acabó - ni tan siquiera comenzó - su carta, que cada día efectuaba, con testimonio de protocolo voluntarioso; aspecto que denotaba una parcela de tiempo, de su día, para ella. Pero que desde hacía dos semanas fue capaz de ejecutar.
Después - siempre -, se levantaba de forma súbita y miraba desde su ventana la lluvia torrencial de la selva; donde se perdían sus pupilas, se acomodaban en el verde espectacular y con un abrigo de recuerdos.
Siempre la misma imagen, el mismo instante de habitación: oscura y aroma de humedad seca que fabricaba la chimenea que horas antes había costado trabajo prender.

Ella, sentada en el rincón de siempre. Atrapada por la angustia inesperada reflejada en su dulce cara pálida. Mirando con ojos angelicales e inocentes pese a su edad de treinta años recién cumplidos. Sus dos largas manos como témpanos disipados y rebeldes al calor y con sus piernas entrecruzadas, en pose de misterio.
Hacía poco que ambos de habían casado - un mes - , y desde entonces, Silvia no hacía más que demostrar su entereza frente a la gran agonía que quedó marcada, desde que Raul comenzó a generar esa idea.
Un día, le comentó que el hecho de volver tarde a casa no era ni más ni menos que por el estrés y la dedicación al trabajo, que no le permitía vida social y tampoco grandes momentos de relax. "Estoy más que harto, Silvia, no puedo seguir con esto. Cada día me esfuerzo y cada vez está más cerca la desesperación. Es, como una olla a presión y no deseo estallar, ni mucho menos desesperar. Mira!!, he leído un artículo en el que se ofertan plazas de investigación, en el mismo centro de La Habana. Son solo unos meses, y si tengo el privilegio de obtener esa oportunidad, estoy seguro que podría ser la solución a mi problema " .
Silvia, mientras tanto, lo miraba aturdida aunque en la pasión por el proyecto de Raul y el énfasis de convencimiento que le estaba aportando, no se daba cuenta que la cara pálida de Silvia denotaba un ligero malestar frente a una sospechada y negativa intuición en su bello rostro.
" Pero no llores !!! " - en tono único e incorporación hacia la ventana con mirada infinita a la gran avenida-, ¡ " tú siempre lloras Silvia, cielo. Nunca solucionas ni proporcionas oxígeno amis problemas, me aíslas más, y si opinaras, de alguna forma sabría de si lo que piensas es a favor o en contra de tu egoísmo. Eres egoísta y puñetera. No te importo y tan siquiera te importa nadie, solo tú.  Tan...Tú!!!. He deseado hacer esto siempre; luchar por todo lo negativamente humano que existe y estuviera a mi alcance, -"una utopía"- ,¿recuerdas? , y ahora es tiempo de llevar a cabo un proyecto que hace tiempo atrás no podría haber realizado. Y lo digo con razón. Estoy convencido de hacerlo y lo voy a conseguir. Mientras tanto, - ahora se vuelve Raul, que es cuando la mira friamente y que, cuando ella rechazó el pulso del eco fuerte de su frase, con ligero temblor de angustia - , sí, mientras tanto, si no deseas esperarme con pasión, hazlo con la enteraza posible de una mujer casada y deseosa del triunfo de su esposo ".
No se quedó muy convencido Raul pero le sirvió, ese modo vulgar e insano, de atreverse a disfrutar la esencia de su decisión aunque, en su daño colateral, existía el vestigio del tremendo impacto que causó en el corazón de Silvia...La dulce, amiga,única e intelectual Silvia...
Ella, no hablaba, No podía y, aunque lo intentaba, sus labios permanecían sellados y temblorosos; como llenos de pánico y de temor por expresar, en vez de palabras, llantos.
Raul repitió la misma escena una semana, día tras día y a la misma hora; como si de un flujo fantasmagórico, a la hora del café, se infiltrara en su cerebro y, desahogadamente expandiera el mismo texto, la misma historia que, después de esa semana, se haría real.
En el fondo, en su paréntesis de memoria, actos y esencias de individuo único en el tiempo - como siempre pensaba , desde joven, en sus cábalas existenciales en los años universitarios-, Raul no deseaba imaghinarse a Silvia en soledad. No quería pensar en todo cuanto de dejaba y tampoco quería desembocar en un pozo de dudas, cuando reflexionaba a cerca del evento que iba a asumir.
Pero, abrió los ojos, medio adormecido y se dio cuenta, desde su vigilia que ya era tarde; desde la ventanita sucia y blanquecina del grueso cristal, miraba los primeros amaneceres de Cuba, desde el avión. Sonreía mientras exploraba cautelosamente el plano horizontal que, como manto verde, le producía un ligero entusiasmo y a la vez, una incógnita; culpable de su taquicardia.
Las palpitaciones de su pecho aumentaban apresuradamente; como cuando uno deja una cuestión importante, pendiente, pero que no puede ni desea solucionar todavía. Era el recuerdo de Silvia.

El verde se hizo más intenso al igual que el estallido tremendo del agua, en el tejado de la cabaña, dejó de apoderarse el espacio sórdido y húmedo.
Dejó de llover y dejó de pensar. Volvió a llenar su vaso que antes de llevárselo a la boca lo estalló contra el fuego quien le devolvió respuesta de su "no aceptación".
Con viento embrutecido salió de la cabaña y comenzó a correr por la selva; con ojos desencajados y vidriosos, y gritando el nombre de Silvia de tal manera que, en la oscuridad verde selva, en las copas de los gigantescos árboles, el revuelo de las aves se hacía cada vez más intenso hasta el punto de ocupar todo el sonido del gran espacio verde.

Al cabo de siete meses, llegó un paquete a una casa. Lo recogió un niño de unos siete años, quien llamaba a su madre, aturdido por el voluminoso señor que lo portaba.
Silvia bajo, como exigiéndose hacerlo,  la escalera; se mostraba un poco a la defensiva por una situación que, más que escabrosa, podría definirse de : confesablemente intuida tiempos atrás.
Parecía que el paquete venía de Cuba y con temblor firmó el resguardo del portador, quien se despidió deseándole un buen día.
Mandó al niño a jugar y se sentó en su sillón de siempre; donde tantos días soportó su levedad y su angustia frente al reto de despensa de dudas que le proporcionaba Raul.
Cuando lo abrió, encontró enseres personales y una carta con fotografías en las que figuraban restos de cabaña y de cenizas. Debajo, una carta ofocial, y donde se expresaba su dolencia frente a la desgracia ocurrida y que leyó; temblorosa y cautelosa:
El Gobierno de La Habana hace mostrar y expresar su condolencia a la esposa y familia de nuestro querido compatriota.
Raul Martínez : hizo de su dedicación  un ejemplo de entusiasmo y servicio al gobierno cubano. Frente a eso, les damos nuestro sentido pésame y admiración por su entereza frente a esta situación. 
               El Gobernador.    " .
Desconcertada y aturdida, cogió una hoja de periódico que tenía guardada en el cajón de un viejo armario;recuperado,raspado y embarnizado a capricho de arte del grande, y lo sacó observando la fotografía de un hombre impresa en un artículo de prensa, bajo la cual, un titular que decía :  "Raul Martínez, pionero e investigador, galardonado con la Medalla a la Investigación Médica Bacteriológica ".
El titular de prensa fechaba un 13 de Septiembre de 1979. La carta iba dirigida con fecha 1 de Agosto de 1979.

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CAPÍTULO II



15 de Septiembre de 2012.   Ciudad de Damasco.

Hacía poco tiempo que ellos se conocían. Habían intentado mantener relaciones mucho antes de cuando por fin, se decidieron.
Fue en aquella noche en la que Raul, se acercó por sorpresa, en el bar de la universidad a pedirle que contribuyera al " impuesto de novato " y el que Silvia  pagó, selló...Visó con una frase : " soy novata aquí, pero experta en el deambular del...Momento?...".
Raul la miró con decisión y quedó asombrado por su belleza muy particular; inteligente, delicada, prudente y aventajada a las demás que había bromeado.
Ahora se encontraban en un viaje que, tras dos semanas después de aquella fiesta habían soñado hacer, un viaje a una ciudad a la que ambos les tenía preparado el destino, como un viaje de recién casados - aunque no lo estuvieran-.
"Damasco!!! , la más antigua!!!"-  , olor a gritos de vendedores, a mirra y leche. Con el aliciente de no parar nunca el proceso de vivir; entre gente y gente y...Vetustos taxis de rodar infinito...
Jalib!!, Jalib!!- le grita el vendedor a Raul - ; rico en leche: dulce, caliente y gorda.
"Son pobres",- pensaba-, "Pero ofrecen mucho".
Así, paseaban entre tanto bullicio y gente con el eco de "cerrada de trato" que se oía de continuo en todo el recinto colorido y perfumado. Mientras paseaba con Silvia - retorciéndose las manos de impresión pre-descrita antes por los ojos de ambos, llenos de telas , olores  y "Shabat"- , Raul recordaba, como un eco descrito la última comunicación que había obtenido por mediación de su correo electrónico y en donde se detallaban una serie de circunstancias paralelas a su desarrollo futuro; futuro perfecto que tendría lugar poco tiempo después. Así, iba recordando - mientras se acordaba de que Silvia vivía ya, en su vida y le propinaba de vez en cuando una sonrisa y un "si , sí amor...Lo que gustes, para ello estamos...",sin saber de cierto lo que ella le estaba proponiendo pero, aun así circundaban las dos ideas : la imagen soñada con ella y el correo recibido de su laboratorio biológico-"La Conferencia Episcopal Colombiana critica duramente la reforma de la justicia recién aprobada ", Donde , y a través de la Oficina para las Relaciones con el Estado rechazó la forma en la que fue aprobada esta reforma, conminando a los congresistas que la promovieron a " dar la cara y asumir una responsabilidad política". En el @mail que Raul seguía reflexionando en micronésimas de tiempo real, no entendía el porque la iglesia, o un grupo a parte de la Bóveda de Mando del mismo Vaticano, se estaba oponiendo al texto aprobado por el Congreso en donde se incorporaron temáticas ajenas al bienestar e interés del pueblo Colombiano y por razón colateral de intereses : El pueblo Cubano y cierta parte del territorio Sirio(prácticamente, en definitiva : Siria).
En un último apartado del correo, se revindicaba textualmente un comentario de un Jefe de Negociado de Investigación Internacional de plagas y enfermedades, el cual abducía a las conciencias mandatarias presentes a entender : "La gravedad de cuanto ha sucedido debe impulsar a nuestros líderes a actuar con más rigor político y respeto a la Constitución. Igualmente, debe de servir a la población en general- por no decir mundial-,para tomar conciencia de la urgente necesidad y asumir un papel más activo, inmediato y protagonista en las decisiones del Estado"..En esta reseña, el adjunto, desplazado en Cuba le comenta a Raul que : "Aquí terminó el pronunciamiento. Llámame urgente para ver y retomar una decisión perfecta a tal evento. Me encuentro aislado de energía y la base de investigación se desplaza al interior de la Selva. Saludos colega futuro...Ánimo y besa a tu bella Silvia"...Terminando el correo o, más bien perfilando con total entereza su reserva de memoria desde que lo abrió y hasta que dejó de observarlo que fue cuando bajaron ambos al mercado.
Silvia acariciaba las telas de seda como una niña a quien le ofrecen un segundo de ternura, un sueño de genios y de cuevas con ladrones, en definitiva, todo el Sueño Tópico que, en su país(Portugal), le llegaba a modo de literatura que, bien era distinto en vivencia. 
Raul le sonreía y con gesto decisivo intentaba regatear con el comerciante - no podía evitar estar desmotivado por el regateo a lo que asentía Silvia, otorgándole un codazo de espabile, aunque esta no pensaba en ese justo momento de "guerra de venta admitida", que Raul sostenía la reflexión de su última noticia recibida en su portátil Apple que hablaba de una denuncia de la muerte de 33 miembros de las fuerzas de seguridad, inscritos en la "frontera burocrática" y los cuales portaban protocolos de actuaciones que se iban a poner en práctica y que se firmaban ese día de denuncia;posible crimen ( una noticia Flash, numerada y con fecha de 04/12.)., al codazo socarrón, reaccionó Raul saliendo de su reflexión preocupante en su instinto científico y terminó el trato con una venta de una tela de seda que, con el tiempo se convertiría en el vestido más lindo que nunca ocupó la esbelta constitución física de Silvia. 

Todo rozaba la perfección y el entusiasmo, en cualquier momento-segundo, a cualquier hora y en ningún lugar, porque ellos disfrutaban "un momento", tan solo así les pareció después, en sus recuerdos, las tres semanas que visitaron Damasco. Recordando la pasión que dejaron; misma de quienes van a dejar la tierra, el sitio, para otros dos enamorados. Mirando los atardeceres como si les surgieran del Alma y cuando la noche comenzaba, se metían en el hotel y sin dar tiempo al tiempo, paraban las horas en besos y caricias, abrigándose del poder más grato que los mantenían y que era el de todos los días : el amor y el respeto que
creían tener el uno, en el otro.
Después de un desgaste de enamorados, a las palabras que surgían de los labios de Silvia se le iban montando unas cuestiones en su cabeza que superaban el sonido de las palabras complacientes de su amada : "...Rusia a bloqueado en el Consejo de Seguridad de la ONU todos los intentos de condena al régimen de Bachar el Asab, en donde recordaba, sostenía que tanto el gobierno de Damasco como los rebeldes y científicos afincados en los 40 últimos años, deberían asumir responsabilidades y deponer fuerza y entregar investigaciones y resultados así como posible armamento secreto, creado en esta ciudad. A esto, antes de dar una sonrisa a Silvia con un acabado de caricia de artista de barro, Raul pensó que dentro de poco, su Departamento iba a ser avalado por tres tipos - políticos o, militares;preocupantes en ese presente, de Raul-, a quienes presentaron en la última propuesta que tuvo lugar el día de la entrega del Diploma de Méritos a la investigación molecular y que pertenecían al Consejo de Seguridad contrario a  El Asad y que procedían de EEUU,Reino Unido y Francia. Estos tres paises, en ese presente social, negaban estar proporcionando material y armamento a los rebeldes, así, con el argumento de que eso solo inflamaría la situación y provocaría un problema interno muy cruento y en el que pudiera peligrar la investigación de tantos, tantos años. 


                  **** "...Otro café...Ya vengo!!"José manuel M.G**
( El café se tomó. El-la- editor llamó. La novela deberá ser presentada en el momento de su publicación. Las opiniones y exhibición de Tema Libro "El Centro del Mundo" publicado por José Manuel M.Garrido **bajo.pseud. Richard Stovinky**//*jmmg*//. Serán avaladas y visto su aprobación por el(la)editorial. 
Por una parte lo considero justo. Por otra no dado que me gusta compartir mi Alma. Hasta la Publicación y OS QUIERO.
José Manuel Martínez Garrido.*//jmmg.

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